Descrpción del Blog

Este es un espacio para compartir enseñanzas en la palabra de Dios, reflexiones y pensamientos dirigidos a nuestras conciencias como herramientas útiles de crecimiento a nuestro ser

lunes, 27 de enero de 2014

El por qué del nombre de este Blog



“Y me volví para ver la voz que hablaba conmigo; y vuelto, vi siete candeleros de oro, y en medio de los siete candeleros, a uno semejante al Hijo del Hombre, vestido de una ropa que llegaba hasta los pies, y ceñido por el pecho con un cinto de oro. Su cabeza y sus cabellos eran blancos como blanca lana, como nieve; sus ojos como llama de fuego; y sus pies semejantes al bronce bruñido, refulgente como en un horno; y su voz como estruendo de muchas aguas. Tenía en su diestra siete estrellas; de su boca salía una espada aguda de dos filos; y su rostro era como el sol cuando resplandece en su fuerza. Cuando le vi, caí como muerto a sus pies. Y él puso su diestra sobre mí, diciéndome: No temas; yo soy el primero y el último; y el que vivo, y estuve muerto; mas he aquí que vivo por los siglos de los siglos, amén. Y tengo las llaves de la muerte y del Hades.” (Apocalipsis 1:12-18)



    En vista de mi profunda pasión por Dios, su amor, su palabra y por la literatura, decidí abrir un espacio en donde pudiese compartir lo que el Señor me ha permitido apreender y me continúa permitiendo. Aquella tarde de Enero decidí que este fuese ese espacio; sin embargo no tenía un nombre para el mismo. 

    Fue entonces cuando muy indecisa, determiné pedirle un nombre a Dios y procedí posterior a una oración a abrir mi Biblia encontrándome así con este primer capítulo del libro de Apocalipsis. La verdad para mi no muy grata sorpresa, mi dedo índice estaba sobre la frase que ahora es el nombre de este Blog: "Como llama de fuego".

    Entonces sufrí unos minutos de negación y argumentación ante Dios y le dije: "Señor, pero este nombre no me gusta, ni siquiera es algo que yo le pondría, el fuego es asociado con el infierno y cosas malignas, los cristianos no querrán visitar mi Blog con tal nombre y me cuestionarán". Pero él me respondió: "He aquí, de Jehová tu Dios son los cielos, y los cielos de los cielos, la tierra, y todas las cosas que hay en ella (Deuteronomio 10:14) y recuerda que el maligno es sólo un imitador".  

    Por lo que, busqué en wikicristiano, un diccionario bíblico online el significado del fuego y encontré que: 

"Por causa de la dificultad de encenderlo, en los tiempos antiguos se mantenían
lámparas encendidas continuamente como una fuente inmediata de fuego. Cuando
Abrahán viajó con Isaac al monte Moriah para sacrificar a su hijo, llevó
consigo fuego para encender el sacrificio (Gn. 22:6, 7). El fuego se usaba para
cocinar, iluminar, calentarse y refinar metales.  Como era un elemento muy
importante para los antiguos, se lo menciona con frecuencia en las Escrituras.
A menudo está asociado con la presencia de Dios (Gn. 15:17; Ex. 3:2, 13:21, 22;
19:18; etc.) y desempeña un papel importante en las visiones simbólicas de la
divinidad (Ez. 1:27; Dn. 7:9, 10; Ap. 1:14; 2:18).  Se compara a Dios con un
fuego consumidor o devorador (Dt. 4:24; He. 12:29; cf Ex. 24:17; Is. 33:14) y
un fuego purificador (Mal. 3:2); hasta la palabra de Dios es comparada con el
fuego (Jer. 23:29; cf 5:14; 20:9).  Así como el Señor castigó a los pecadores
con fuego (Lv. 10:2; Nm. 11:1; 16:35; 2 R. 1:10, 12; Jud. 7), los aniquilará
finalmente con él (Ap. 20:9).  El fuego del cielo expresó la aceptación de Dios
de una ofrenda (Lv. 9:24; Jue. 6:21; 2 Cr. 7:1).  Se describe a los ángeles
como ministros y como flamas de fuego (Sal. 104:4)."

    ¡Que Tremendo! y comprendí que así como al Espíritu Santo de Dios se le asocia y compara con el agua, con el aceite, así  también  él  es  fuego,  fuego  que  ilumina, fuego que nos quema con su presencia, que  nos  refina como  a  metales,  fuego que nos aprobará o nos consumirá "el gran y terrible día" (Malaquías 4:5) en el final de 
los tiempos.

    Por otra parte hurgando en el Diccionario de la Real Academia Española y otros encontré que los ojos son "los órganos encargados de percibir mediante  la acción de la luz" y que son "los  órganos  que  detectan  la luz"; y las llamas son "luz que se genera a partir del fuego".

    Me imaginé por un momento cómo será la mirada de Jesucristo, así como llamas de fuego que todo lo iluminan, que desnudan toda verdad, que disipan y consumen toda tiniebla, todo mal, lo consume con tan sólo mirar; más con  esos  ojos  a  de  detectar  el  bien,  la  luz,  sus  verdaderos hijos son luz dice la palabra. También los ha de detectar  con  tan  sólo  mirar  y  con  el calor  del fuego de su mirada los moldea a él, los refina como metal y los aprueba al no ser consumidos.

    Más sin embargo, Dios es un Dios sin límites, amplio, tanto que,  mal pudiera yo afirmar que la  explicación  del porqué de este nombre del Blog se limita a la aquí escriturada. Pero puedo afirmar con certeza que este nombre nació del corazón de Dios.